miércoles, septiembre 19, 2007

HERMANN: LA PASIÓN DE NARRAR de Norman Fernández

Hermann. La pasión de narrar
Norman Fernández
Colección Viñetas nº 2
Editorial Dolmen
8 euros

La primera vez que leí un cómic de Hermann iba al colegio. Eran mediados los años 70 y fue en el “Mortadelo especial Fumadores”, con el título “Una aventura gafe” de la serie Bernard Prince. Poco más tarde descubrí a Jeremiah en la biblioteca pública de mi ciudad. En cuanto el bolsillo me lo permitió empecé a coleccionar sus series y desde entonces, más que fidelidad a los trabajos de este autor, diría más bien que tengo devoción por su obra.

Con semejante obsesión no podía dejar de comprar y leer el libro que Dolmen acaba de publicar dentro de la Colección Viñetas. He “devorado” el libro de Norman Fernández y me ha gustado tanto el contenido como la forma de tratar la carrera de Hermann, un enorme dibujante, narrador y guionista, todo en uno.

Estructurado en capítulos dedicados a sus series principales, Bernard Prince, Comanche, Jeremiah, Las Torres de Bois-Maury, o los títulos independientes, cuenta cómo empezó Hermann a dibujar de forma profesional, la importancia que otorgaba a una narrativa más cinematográfica, o la relación con su primer guionista Michel Reigner ”Greg”, del que se iría desligando hasta convertirse en un autor completo en solitario.

Está bien repleto de curiosidades y anécdotas: desde la aparición del propio dibujante en breves momentos como “secundario” en algunos álbumes hasta la influencia del mundo post-apocalíptico visto en Jeremiah sobre las películas de Mad Max (y no a la inversa) o su participación fallida en la película “Piratas” a petición de su director Roman Polanski para realizar el storyboard.

Los capítulos iniciales son los que más han gustado, sobre todo el dedicado a Comanche, por ser sus primeras series las peor publicadas en nuestro país y, por tanto, menos conocidas que Jeremiah o las aventuras del caballero Aymar.

También acierta Norman Fernández en la selección de las páginas y portadas reproducidas, de ediciones hechas en media Europa e incluso los USA.

Sólo ha habido un aspecto que no me ha gustado y considero que se trata de un error: cuando trata el primer ciclo de Las Torres de Bois-Maury, nos revela su final. Yo he leído la serie, pero puede que algún lector esté en el proceso y destriparle el argumento de una de las mejores series del cómic mundial, puede que no sea de su agrado.

Impagable resulta el apartado final con todos los títulos ordenados por series y con su fecha de publicación original y española (citando editorial y formato), en caso de haber existido.

Publicar libros teóricos sobre el cómic, sean autores o personajes es algo bastante habitual en el mercado francés, pero no lo es tanto en nuestro país. Dolmen es una editorial valiente en este aspecto porque, además de ofrecer mensualmente una revista sobre cómic, también se atreve con monográficos sobre autores, aunque con un enfoque marcadamente americano.

Teniendo en cuenta lo anterior y que Dolmen está publicando (aunque de manera un poco aleatoria) a Jeremiah (Mercenarios, nº 20 y Elsie y la calle, nº 27) y varios de sus one-shot (Manhattan beach 1957, Zhong Guo y Drácula) en unas ediciones muy dignas, no veo la posible explicación a la elección del formato escogido para esta colección.

Estamos ante un libro de tamaño ligeramente más grande que un cómic de manga, en el que tenemos que esforzar nuestra vista para poder observar las páginas con dibujos o portadas del autor que acompañan al texto de Norman y que forman un conjunto inseparable con él.
Pero el reducido tamaño no es lo único: todos los dibujos y portadas interiores están reproducidos en blanco y negro. Si ya era muy difícil apreciar la evolución de la línea, resulta, pues, imposible hacer lo propio con el color, aspecto fundamental sobre todo a partir del momento en que el autor prescinde de coloristas (en muchos de sus títulos, el catalán Fraymond,) y asume personalmente esa tarea.

Entiendo que este libro no está dirigido a lectores de cómic que no conozcan el trabajo de Hermann y así encauzarlos a comprar, entre otros, los títulos de la propia Dolmen, sino que va destinado a aficionados que ya son seguidores del autor (o fanáticos como yo), a los que tienen en su casa muchos o prácticamente todos sus álbumes y que quieren saber más sobre el Sr. Huppen, sus técnicas, la evolución de estilo, su bibliografía completa y que no nos importaría gastarnos un poco más en algo que nos parece que merece la pena.

Con todo, la verdad es que prefiero una edición como ésta a la nada, y el consejo final es comprar el libro de Norman Fernández, pero sobre todo leer los álbumes de Hermann, aunque con tan dilatada trayectoria y haber sido publicado por muchas editoriales en España, muchos son difíciles o imposibles de encontrar.

Nota: Hemos seleccionado para este post imágenes distintas de las que aparecen en el libro de Norman Fernández, por mero afán divulgativo de la obra de Hermann.

No hay comentarios:

Publicar un comentario