- Septimus. En un frío día de invierno, Silas Heap, mago ordinario, encuentra un bebé abandonado. Marcia, maga extraordinaria, le advierte que no lo diga. Al llegar a casa se encuentra con que su séptimo hijo, recién nacido, ha fallecido. Él y su esposa Sarah criarán a la niña. Jenna, con los otros seis hijos en una época terrible: la reina ha sido asesinada y la Magia es repudiada y escondida. El Castillo, la ciudad en la que viven, es un conjunto abigarrado de calles, el Dédalo, con un hermoso Palacio que ahora ocupa el Custodio Supremo, usurpador del poder, y la Torre del Mago donde aún se refugia la Magia. Han pasado diez años y la familia Heap recibe la visita de Marcia que desvela el gran secreto de Jenna. Huyen del mago oscuro, recogen a un pobre muchacho y se refugian en la Marjal con la tía Zelda. Continúan las sorpresas y las aventuras hasta un bonito desenlace.
- Septimus y el hechizo imposible. La familia Heap se ha instalado en Palacio. Todo parece ir sobre ruedas. Septimus avanza como mago siendo el aprendiz de Marcia, y Jenna va aprendiendo sus obligaciones. Pero... aparece Simon, el hijo mayor que se lleva a Jenna por resentimiento hacia su hermano. Ante la incredulidad de la familia y la distracción de Marcia, Septimus parte en su busca. Así se inician las aventuras de Septimus y Jenna en esta segunda parte, el encuentro con amigos perdidos, la parición del Aquelarre de Brujas Negras y la sorpresa de un encuentro inesperado.
- Septimus y el último alquimista. La vida en Castillo transcurre con placidez hasta que Silas Heap, junto con su amigo el señor Gringe, traslada el cuadro de una antigua reina que encuentran en una habitación sellada. Es cuando empiezan los problemas: el fantasma de la reina Etheldredda demuestra su maldad a Jenna, surge una plaga en Castillo de origen desconocido, el comercio se para por la cuarentena obligada y la joven Snorri Snorrelssen, comerciante del norte, ve frustrados sus sueños de mercader. Marcia investiga la plaga y ve una nota escrita hace 500 años por alguien conocido. ¿Será posible el viaje en el tiempo? Septimus desaparece, y Jenna, junto con Nicho y Snorri, irá en su busca, pero el problema no es dónde sino cuándo. Amigos y nuevos compañeros se unirán para resolver los problemas y cada uno aportará su granito de arena para intentar solucionarlos.
La autora Angie Sage, nacida en Londres, se dedicó primero a la ilustración de libros infantiles hasta que se decidió a escribirlos. Con Septimus obtuvo un gran éxito que ha continuado con Septimus y el hechizo imposible y el más reciente Septimus y el último alquimista, todos ellos publicados por la Editorial Montena.
Es una obra enmarcada en la llamada literatura juvenil pero como siempre esta definición no es suficiente, se queda corta. Atrae a los jóvenes pero aleja a todo potencial lector de fantasía adulto. Y también, como siempre, se abre el debate de las clasificaciones tanto de género como por edades de la literatura.
Es una obra protagonizada por jóvenes, con aventuras, magia, relaciones familiares conflictivas. Hay un lenguaje cuidado, mesurado, con las justas descripciones de paisajes (la descripción de la Marjal en Septimus me encanta).
Los personajes secundarios son muy importantes. Como todo buen castillo que se precie tenemos fantasmas. En Castillo son los antiguos magos extraordinarios, seres benévolos que ayudan a nuestros protagonistas, dentro de las limitaciones que les impone su "fantasmez".
Los animales también son importantes. El Boggart de la Marjal es un ser que ayuda y cuida de tía Zelda. Es tan atento y educado que resulta entrañable. En este mundo de magia no nos extraña que los animales hablen y en esta saga es Stanley, la rata correo quien se encarga de ponernos al día de los cotilleos y noticias. Su trabajo llega a ser muy importante: es el correo confidencial que siempre encuentra a sus destinatarios.
Los nombres de los lugares son muy sencillos y no despistan a nadie: La ciudad: Castillo; el palacio: Palacio; el puerto de mar: Puerto; las marjales de tía Zelda: Marjal. En cambio, los nombres de persona son interesantes e incluso rimbombantes: Septimus, siete, hijo séptimo de un séptimo hijo, el número mágico por excelencia, ideal para ser un gran mago; Zelda, con zeta, la última cuidadora; Snorri, nombre vikingo para una comerciante del helado norte; la malvada reina Etheldredda, nombre rimbombante donde los haya.
En esta saga de "Septimus" el elemento femenino tiene mayor importancia de la habitual en las obras de fantasía. Jenna comparte protagonismo con Septimus al compartir familia, aventuras y obligaciones. Sarah Heap, la madre, es quien lleva la casa y educa a sus hijos ante el despiste, y a veces inconsciencia, de su esposo. Marcia, la maga extraordinaria, es quien detecta el sumo poder de la Magia, en contraposición a Alther, el anterior mago extraordinario, convertido en fantasma y que ahora tiene limitado su campo de actuación. Tía Zelda cuidadora y protectora, guarda las tradiciones, conservadora y consejera. Jannit Marten, dueña del astillero, mujer emprendedora y muy trabajadora, apasionada de los barcos. El colectivo de magos se diluye ante la presencia de las Brujas del Bosque (todas mujeres, por supuesto) y las Brujas Negras del Aquellarre. Así que en el colectivo mágico sólo tienen importancia las mujeres.
La mayoría de los personajes malvados son hombres: DomDaniel (Septimus), antiguo mago extraordinario que desea la vida eterna, el Custodio Supremo que usurpa el poder de la reina, el jefe de los escribas impuesto, que no electo, frenta a Jillie Djinn. El hemano mayor, Simon, que se desliga de la familia (Septimus y el hechizo imposible). Estando la familia Heap formada por siete hijos varones y Jenna, Simon se comporta mal, los siguientes cuatro se inhiben de los problemas cuando se quedan a vivir en el Bosque y será únicamente Nicko quien más cerca esté de Septimus, quien le acompañe y ayude en todas sus aventuras. En Septimus y el último alquimista la gran protagonista malvada es una mujer: la reina-fantasma Etheldredda. Su hijo, el alquimista, es sólo su comparsa. También en esta parte aparece el personaje femenino Snorri Snorrelssen que será de gran ayuda a Septimus y Jenna.
La autora ha querido mostrarnos un reino donde las mujeres tienen relevancia y su influencia es grande a todos los niveles. Un reino gobernado por reinas con libre elección de esposo, costumbre "democrática" que no es compartida por otros reinos. Tal vez sea ésta una "lectura" demasiado sofisticada porque la saga de "Septimus" es amena, rápida y no para dar sorpresas.
Destacamos también las ilustraciones que encabezan cada capítulo, en los tres libros, realizadas por Mark Zug, magníficas sin lugar a dudas.
Os animo a leer y conocer esta saga de "Septimus" donde encontraréis personajes estupendos y una narración con aventuras y muchas sorpresas. Y también animo a los lectores adultos a pasar de estereotipos de literatura juvenil enfrentada a literatura adulta. Lo importante es leer buenas obras y esta saga, desde luego, lo es.
Que buena pinta tienen las ilustraciones.
ResponderEliminarQue voy a decir de mis trazeros, si soy un adoptado vuestro. Espero que este año os vaya muy bien a todos. Que nos volvamos a encontrar en el Saló y disfrutemos como hasta ahora.
ResponderEliminarBuenas fiestas a todos, espero conoceros a las nuevas incorporaciones, y como tengo un morro que me lo piso, he decidido que vuestras recomendaciones comiqueras son las mejores del mundo y a primeros de enero florecerá Trazos en el bloc en mi blog.
Os quiero a todos.
Y si alguno se escapa a BCNegra me veréis en acción (creo que perderé todos los kilos que agarre esta Navidad).
José Andrés Espelt
Estoy fascinada con este blog... y hace un tiempo lo había agendado en favoritos pero ¡¡no había vuelto a él!! Ahora que inicio las vacaciones (Argentina) me dedicaré a visitarlo y disfrutarlo como es debido.
ResponderEliminarAdministro el blog ¡Piezas de a ocho! y allí comento mucha literatura épico fantástica pues no sólo es la que me apasiona sino que quiero contagiar a otros a descubrirla...
Me apena no poder acceder a las segunda y tercera parte de Septimus (no se consiguen acá), pues leí la primera y me encantó, y a esta la incluí en el Trabajo de Tesis de Postitulación en la cual indagué sobre el juvenil fantástica.
Coincido totalmente con el análisis que han posteado.
En mi blog hago una lista de libros que me apasionaron este año, y un papá me comentó que elegiría uno de ellos para regalar a su niña en Navidad ¡sigamos contagiando la pasión!
Los espero en mi Foro recién estrenadito, para que comenten sus ideas y opiniones,
Un abrazo
Gaby