CRÓNICA: XIII SALÓN INTERNACIONAL DEL CÓMIC DE GRANADA

Este año una representación de Trazos en el bloc ha visitado el Salón del Cómic de Granada, que, aunque sea nuestra primera vez, es un evento que ya va por la treceava edición, y que, por lo que pudimos comprobar, tiene una vida muy saludable y un futuro muy halagüeño.

Como es uno de los salones más importantes de nuestro país, en número de autores invitados, multitud de actividades que se realizan durante los cuatro días, afluencia considerable de aficionados, gran cantidad de stands, recinto apropiado para la realización del Salón, y un largo etcétera que intentaré explicar a lo largo de esta crónica, y aprovechando que por motivos laborales teníamos unos días libres para poder asistir durante estas fechas, decimos ir tres de nosotros, desde el viernes hasta el domingo, para disfrutar de esta reunión de aficionados y amantes del noveno arte.

Para empezar, el lugar donde se celebró el evento, dos pabellones del recinto ferial de Fermasa, en Armilla (pegadito a Granada), reunían los requisitos necesarios para poder celebrar un salón de estas características, un lugar amplio donde poder realizar todas las actividades de manera desahogada y sin molestarse entre ellas a la hora de celebrarse. Y así, los karaokes y cosplays se realizaban en un pabellón adjunto, de gran capacidad, que podía reunir sin problema a los cientos y cientos de otakus que iban a participar en los diferentes concursos, y donde se podían celebrar los conciertos programados sin ningún problema; las charlas y conferencias se hacían en un recinto más pequeño, un salón de actos, situado junto a la cafetería (donde podías perfectamente descansar, tomarte un refresco y tomar el sol gracias a los magníficos días primaverales que disfrutamos durante los tres días), ideal para poder escuchar las charlas sin interrupción alguna de los demás actos del Salón; y, el Salón en sí, ubicado en un amplio espacio donde cabían perfectamente los innumerables stands de las librerías y las editoriales, las cuatro exposiciones en un lateral, y los diversos concursos de videojuegos y otras actividades (algunas de las cuales se hacían en el exterior) en el otro opuesto, que posibilitaban que pudieras deambular si ningún problema de un lado para otro, y poder tranquilamente ojear y hojear todo lo que los stands te ofrecían.

Vicente Cifuentes, Juanjo RyP y José Fonollosa firmando en el stand de Aleta

Las editoriales pequeñas estuvieran representadas en el Salón de la mano de Aleta, Dibbuks, La Cúpula, Astiberri, Dreamers, Viaje a Bizancio, Ariadna, junto a otras muchas, y a la ya habitual en todo tipo de eventos de este tipo, Glénat. Que estuvieran las editoriales aquí representadas posibilitaba que pudieras adquirir cualquiera de los diferentes títulos de su fondo editorial que a veces ya son difíciles de encontrar en tus respectivos puntos habituales de venta, y poder tener la oportunidad de conseguir la firma de muchos de los autores a los que editan, que traen especialmente para la ocasión, con lo que la recompensa que obtienes hace que la labor que realizan sea de agradecer por el aficionado.

Los diferentes stands de las librerías ya son habituales en este tipo de salones, donde todo lo relacionado con el manga y el anime, en lo que a merchandising se refiere, se gana la palma, por lo que los otakus tenían la posibilidad de conseguir todo tipo de muñequitos y demás accesorios de sus series favoritas. Pero yo me decanté más por los stands de cómics de segunda mano, donde encontré cantidad de interesantes ofertas que me hubieran arruinado el bolsillo de no contenerme, pero que no pude resistir el llevarme algunos títulos, que a veces superaban el 50% de descuento, estando el material impecable y sin estrenar, como todo el material de Vertigo y DC que en su momento publicó la Editorial Norma y que ahora se está saldando a unos precios increíbles e irresistibles.

Otra de las cosas imprescindibles de todo salón que se precie son las diferentes exposiciones que se celebran en él. En esta ocasión la organización había montado cuatro:

Una dedicada a las obras ganadoras y finalistas del Certamen de Cómic del Instituto Andaluz de la Juventud, donde podíamos observar el gran trabajo y esfuerzo realizado por jóvenes artistas del mundo del cómic en ciernes, con grandes posibilidades, de cara a un futuro cercano, de dedicarse con éxito a ello, habiendo obras de todos los estilos y temáticas posibles, en B/N o a color, usando diversas técnicas, y que gracias a premios y concursos como estos pueden tener la posibilidad de foguearse y, poco a poco, abrirse un camino que es costoso, pero que con trabajo y no cayendo nunca en el desánimo, puedas tener posibilidades de ganarte la vida haciendo lo que más te gusta: trabajar en todo lo que gira entorno al noveno arte.

A continuación estaba la dedicada a Miguel Brieva, “Sobras Maestras”, donde se puede degustar el exquisito trabajo de este autor que es conocido sobre todo por su obra Enciclopedia Universal Clismon: Bienvenido al mundo, que recopila material publicado anteriormente en Dinero, El País o El Jueves , donde hace una crítica descarnada y mordaz de nuestra sociedada de consumo, siempre utilizando un humor ácido y corrosivo.

En el siguiente módulo, compartiendo espacio con la exposición de Cómic Gay, nos encontramos con la del ilustrador Víctor Capdevila y con su obra expuesta basada casi en su totalidad en la ilustración de temática relacionada con el mundo de los cómics y del cine, donde en grandes lienzos nos encontramos con unos cuadros representando a varios iconos del mundo de los cómics y del cine, ilustraciones llamativas donde el uso de los colores planos y fríos destaca sobremanera, obteniendo unas composiciones muy interesantes e impactantes y una interpretación muy personal de cada uno de los personajes representados, donde se destacan ciertas parte concretas, lo individual sobre el conjunto, con tonalidades oscuras con un maestro uso del claroscurismo, que conforman unas ilustraciones de gran belleza crómatica.

Y, para finalizar, la exposición de “Cómic Gay Actual en España” donde se hace un breve repaso a las diferentes obras y los diferentes artistas que dedican su trabajo a crear historietas donde la temática gay es la predominante, una temática concreta que está abierta a cualquier tipo de lector, donde vemos trabajos de autores tan importantes como lo puede ser Sebas Martín, y donde cabeceras como Claro que Sí, publicadas por la Editorial La Cúpula, "provoca un verdadero outling (salida del armario) de autores gay, ya sean nuevos, como otros de reconocida carrera profesional, que no habían tenido ocasión de publicar algunos de sus trabajos más personales", como muy bien nos dice dicho autor.

En cuanto a las Mesas Redondas, lamentablemente sólo pude asistir a la de “Promoción de las Historieta”, ya que las otras se solapaban con las sesiones de firmas, cosa que te hacía elegir entre una y la otra, y en mi caso las firmas siempre son una de las actividades prioritarias en cualquier salón. Brevemente diré que la charla la daban Joan Navarro, editor de la Editorial Glénat, y Rafa Marín, escritor y guionista de cómics, donde de una manera breve comentaron la situación de la publicación de cómics en nuestro país, de la poca promoción del cómic que existe, tanto a nivel publicitario como institucional, comparándolo siempre con otros mercados, donde recalcaban que hoy en día son importantes las librerías especializadas, pero cada vez más lo son las librerías generalistas (Fnac, La Casa del Libro, El Corte Inglés) y que algún día lo puedan ser también las grandes superficies comerciales (curioso fue ver en una parada que hicimos en una estación de servicios, a nuestro regreso a Castellón, que colecciones como la de Caroline Baldwin o Natalia (eso sí, de oferta), publicadas por Editions Casterman, estaban a la venta en la tienda de la estación). Joan Navarro a la pregunta de qué obra ha vendido más su editorial, en sus más de diez años como editorial de cómics, dijo que en conjunto Paracuellos de Carlos Giménez, pero en cuestión de dos años, la reedición de Esther de Purita Campos a cuatriplicado las ventas de la anterior, incluso superando en ventas su continuación, Las Nuevas Aventuras de Esther, con dibujo de la autora y guiones de Carlos Portela, respecto de su precursora. También recalcó que la colección que más ventas ha tenido, Naruto, nunca ha tenido ningún tipo de promoción (cosa que el público asistente recalcó que la verdadera promoción la hacía la emisión de las series de anime por televisión), y que gracias a los beneficios obtenidos por el manga, la editorial puede reeditar material de autores clásicos españoles.

Rafa Marín y Joan Navarro en plena conferencia

En cuanto a las sesiones de firmas, sólo lamentar no haber conseguido la firma de Brian Bolland en mi Batman: La Broma Asesina, objetivo imposible de conseguir por la gran cola que tenía todos los días el autor. Otra vez será. En el Salón del Cómic de Granada las firmas se realizaron en cinco zonas: en la Zona de Firmas de la organización, perfectamente organizadas a mi parecer, con las consabidas listas que los encargados de formarlas seguían su orden a rejatabla, por lo que si estabas entre los quince primeros tenías la firma asegurada, no haciendo falta estar en la cola y sólo estar cuando dijeran tu nombre. Otra zona fue una de las citas obligadas en cualquier salón, el stand de Aleta. Joseba Basalo, hay que reconocer, se lo monta a las mil maravillas y siempre cuida a los autores españoles (y alguno de fuera de vez en cuando) como nadie, currándose unas sesiones de firmas que no veas, con el “lugarteniente” Jordi Bayarri siempre al pie del cañón y encabezando a todos los “chicos” Basalo. Luego, Glénat, como ya he dicho anteriormente, tuvo todos los días a Brian Bolland, todo un lujazo, organizándose unas colas interminables para conseguir la preciada firma. Otra zona fue la del stand de la nueva editorial Viaje a Bizancio Ediciones (a la que le deseamos toda la suerte del mundo en esta nueva aventura), donde algunos de los autores de la obra colectiva Desde el Abismo, y Gaspar Naranjo con su De cómo te conocí, te amé y te odié, firmaban todos los días. A esto añadir la sesión de firmas del sábado de Sebas Martín en el stand de La Cúpula.

Brian Bolland firmando en el stand de Glénat

Las diversas dedicatorias con que nos obsequiaron los autores, pronto las tendréis en otros posts que haremos sobre ellas.

También destacar la presencia de los editores representantes de editoriales como Lombard, Vertigo y Markosia, que posibilitaron que nuestro colega Gonzalo tuviera una entrevista de trabajo con los dos últimos, donde valoraron su trabajo y le animaron a seguir por esa línea, que por talento no será. Un día de estos ya me veo yo haciendo cola para que me dedique una de sus obras futuras (bueno, a ver si tengo enchufe, y me evito hacerla, je, je, je...).

Phil Jiménez y Jill Thompson en una sesión de firmas

En resumen, un Salón que nos ha dejado un buen sabor de boca, perfectamente organizado por los chicos de e-veleta, donde puedes disfrutar durante cuatro días de eso que llaman tebeos y todo lo que gira a su alrededor, consiguiendo dedicatorias de primeras firmas, extranjeras y nacionales, y que a pesar de ser un Salón joven, ya tiene suficiente experiencia para llegar uno a la conclusión de que va por buen camino y que seguro que llegará, a corto plazo, a pisar los talones al salón de referencia de nuestró país, que no es otro que el Saló del Còmic de Barcelona. Seguro que otro año picaremos de nuevo y los TraZeros haremos un nuevo Viaje a Granada.

Un saludo cordial.