Empecemos con una declaración de principios: me gusta el western, desde siempre; pertenezco a una generación que se destetó con al menos una película semanal del oeste y con series como “La ley del revolver” o “El hombre del rifle”. Mis primeros juguetes: los indios y vaqueros de Comansi.
No puedo remontarme a cual fue el primer tebeo que leí, pero sí que el Sheriff King fue mi primer héroe del cómic; lo que sí recuerdo (por tener algunos añitos más, unos 8 o 9), es que mi primer libro -librito, más bien- fue una biografía novelada de Buffalo Bill, en una edición infantil de solo texto, sin viñetas y puede que con alguna ilustración, eso sí, para los bizarros niños de la época, ya que incluía una escena donde se le arrancaba la cabellera a un indio amigo de Bill.
El género, en todos sus formatos, ya hace mucho que entró en decadencia, aunque de tanto en tanto se estrena algún film de calidad como “Sin Perdón”, “Open Range”, o “Gerónimo”, entre otras, y al menos aún tenemos disponibles algunas series en el cómic como Teniente Blueberry, Comanche o recientemente Tex y Jerry Spring.
Pero, si 'en la literatura' es muy fácil comprar en una librería de tamaño medio una novela negra, de terror o de fantasía, históricas o bélicas, de zombies o del género rosa, ¿cuántos títulos puedes ver de novelas del oeste?
De entre todos los géneros literarios posiblemente éste sea el menos considerado, al menos por los editores. Las novelitas de Marcial Lafuente Estefanía, Silver Kane, José Mallorquí (El Coyote), o de Zane Grey que cuando era pequeño se podían encontrar en cualquier quiosco tenían la categoría de lectura barata, popular, de barbería y, por tanto, de ínfimo peso literario, nuestro “pulp” particular.
Así pues, si no contamos como western los textos ambientados en la época colonial (El último mohicano), en la Guerra Civil Americana ("The Civil War 1861-1865, las novelas"), y los ensayos/estudios sobre la historia o la forma de vida y cultura de los indios (Enterrad mi corazón en Wounded Knee), no nos salen demasiados títulos, y como veremos en buena parte acaparados por la difusión previa de un film, como pasó por ejemplo con “Bailando con lobos” de Michael Blake (RBA, 1988).
Como acabamos de decir, es gracias a la nueva versión cinematográfica de esta historia -dirigida por los Hermanos Cohen- que podemos leer esta entretenida novela. Con tan sólo catorce años, Mattie Ross busca al asesino de su padre, por lo que requiere la ayuda de Rooster Cogburn, un veterano caza-recompensas de amplia experiencia. La historia está contada en primera persona por esta espabiladísima y temeraria niña, por lo que los acontecimientos y los lugares se describen desde una óptica entre la inocencia -“En Fort Smith… los edificios son de piedra y todas las ventanas necesitan un lavado”- y la obstinación de conseguir su objetivo: “¡Un colt Dragoon¡ ¿Qué haces con esa pistola?... Era de mi padre. Me propongo matar a Tom Chaney con ella si la ley no consigue hacerlo”.
A pesar de su corta edad, “Chaval”, un muchacho de 16 años, ya va por el mal camino, sus líos y peleas le llevan a enrolarse en un grupo de cazadores de cabelleras, unos mercenarios cuya paga oscila en función de los indios -sin importar edad o sexo- que hayan podido asesinar. Una hipnótica horse-movie -si se puede emplear tal término- a través de los desiertos entre Estados Unidos y México en 1849, donde no encontraréis ni buenos y malos, ni moral ni moraleja, simple y llanamente es un descenso a los infiernos. Novela dura, con pasajes no aptos para estómagos pusilánimes. Al igual que en otras novelas de McCarthy -la Trilogía de las praderas o La carretera-, la obra tiene un gran nivel literario, dudo que hasta el lector o el crítico más exigente pueda quedar defraudado.
La vida de Jack Crabb entre los cheyennes y entre los hombres blancos es el argumento de esta novela, contada siempre bajo un prisma de humor, aunque no estamos ante una simple acumulación de gracias o curiosidades chistosas, sino que lo que resulta realmente interesante es describir tal y como fueron -o al menos pudieron ser- los hechos y la forma de vida de nativos y colonos durante las guerras indias de la segunda mitad del siglo XIX. Esta novela publicada en 1964, -llevada al cine en 1970 por Arthur Penn con Dustin Hoffman de protagonista- formó parte de la ola revisionista que cambió la visión clásica de la Conquista del Oeste. Incluye versión de la batalla de Little Big Horn.
Si sabéis de alguna otra, por favor no dejéis de hacer vuestra aportación en los comentarios.
Otras Recomendaciones TraZeras para este verano de 2011:
Totalmente de acuerdo en respecto a McCarthy, a mí me falta leerme las dos últimas de la trilogia de la pradera. Y me has convencido para darle una oportunidad a Valor de ley, ya que estaba dubitativo entre leermelo o no,
ResponderEliminarsaludos!.
·Warlock, de Oak Hall
ResponderEliminar·The Assassination of Jesse James by the Coward Robert Ford, de Ron Hansen (en inglés y con su correspondiente adaptación cinematográfica, excelente)
·La dama y el recuerdo, de Silver Kane
Como actualización importante habría que añadir la colección Frontera de la editorial Valdemar, con títulos tan imprescindibles como "El Trampero" (las Aventuras de Jeremiah Johnson), "Centauros del desierto", y recopilaciones de relatos como "Indian Country", "Un tronar de tambores" y "El árbol del ahorcado". Todos en buenas ediciones y a un precio aceptable.
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ResponderEliminarHola ! Presento esta novela del Oeste "Tiempos perdidos", trepidante y entretenida, de pocas páginas.
Os adjunto el link para poder leer la sinopsis y el primer capítulo:
http://www.bubok.es/libros/228290/TIEMPOS-PERDIDOS
En el caso de querer un ejemplar, no dudéis en contactar conmigo. Si os gustan las clásicas novelas de bolsillo antiguas, este nuevo libro os convencerá.
Muchas gracias y saludos,
Jubal Troop de Paul L. Wellman se hizo una pelicula Jubal protagonizada por Glenn Ford
ResponderEliminarIncreíble que nadie haya leído "La paloma solitaria". Gran obra maestra y premio Pullitzer. Léela sin falta, me lo agradecerás. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias por la aportación. La verdad es que no conocía esta novela y tiene buena pinta siendo un premio Pulitzer, pero he estado buscando en las principales tiendas de libros por internet y está descatalogada.
ResponderEliminarVolvemos a insistir en que le echéis un ojo a la colección Frontera de el edit. Valdemar, que lleva ya 7 títulos publicados, todos de gran interés.
Me sumo a las recomendaciones:
ResponderEliminarhttp://bolsilibrosdeloeste.blogspot.com.es/