Ahora nos ofrecen ambos, esta vez de la mano de Planeta DeAgostini dentro de su línea Forum, otra obra nuevamente de temática sci-fi, Héroes del Espacio # 1: La puerta del cielo, primer álbum (de una colección que no tiene definido de cuantos volúmenes constará, todo dependerá de la aceptación del público en palabras del propio guionista) que es el que vamos a tratar de desentrañar a través de este post.
Esta obra en su primer volumen vuelve a explicar por enésima vez, a modo de preámbulo de una obra que aún no sabemos que derroteros seguirá en futuros álbumes, el proceso de reclutamiento de jóvenes talentos por encima de la media para serles otorgado el gran honor de formar parte de una élite militar capaz de explorar y conquistar el espacio exterior.
Esta obra en su primer volumen vuelve a explicar por enésima vez, a modo de preámbulo de una obra que aún no sabemos que derroteros seguirá en futuros álbumes, el proceso de reclutamiento de jóvenes talentos por encima de la media para serles otorgado el gran honor de formar parte de una élite militar capaz de explorar y conquistar el espacio exterior.
Todo esto lo podemos ver y comparar, con sus diferencias, en una obra fundamental de ciencia ficción de todos los tiempos como es El Juego de Ender de Orson Scott Card (que, por cierto, aquí estamos esperando con ganas la publicación de su adaptación al cómic que están llevando a cabo para Marvel el propio Scott Card con dibujos de nuestro Pasqual Ferry). O también otras obras de la mejor ciencia ficción como las de los primeros años de la serie de Miles Vorkosigan de Lois McMaster Bujold o la Starship Troopers de Robert A. Heinlein o, para citar alguna más reciente, la precuela que este año pudimos ver en la gran pantalla de Star Trek: El futuro comienza de J. J. Abrams.
Santiago García nos ofrece la típica historia de aventuras de un futuro muy cercano donde unos jóvenes son seleccionados para formar parte de la élite del ejército europeo, pilotos de los Astros, los últimos modelos de cazas del espacio para la colonización del sistema solar. Utilizando los saltos en el tiempo, el guionista consigue intrigarnos en qué actual misión peligrosa o aventura están enfrascados nuestros cuatro protagonistas (Thierry, Verónica, Cristina y Marc), cada uno con una personalidad concreta e identificativa, y con sorpresas inesperadas, así como nos va narrando en flashbacks la vida de cada uno de ellos y su procedencia y de cómo fueron reclutados, adiestrados y seleccionados para formar parte de la Academia Espacial Europea... una de las típicas opciones empleadas desde siempre para dar a conocer al público, de manera rápida, directa y sencilla, a los personajes protagonistas de esta y futuras historias, que posibilite que el lector se haga con la historia y los personajes y se integre en ella haciéndola/os suya/os. A un ritmo adecuado, sin prisas pero sin pausas, nos vamos introduciendo en la historia introductoria que Santiago García nos quiere ofrecer, consiguiendo con unos fluidos diálogos y con la tensión e intriga justa, mantener la intriga del lector, transportándonos a una lectura de ciencia ficción y de aventuras típica de la mejor literatura pulp de todos los tiempos.
En cuanto a Javier Peinado, es un dibujante que habrá que seguirle la pista muy de cerca, porque dentro del panorama español es de los pocos de la nueva hornada de jóvenes autores que está apostando por ofrecernos un trabajo dentro de lo que podríamos denominar claramente (nunca mejor dicho) de la línea clara de gran tradición dentro de la Bande Dessinée, a rebufo de grandes maestros como fueron Hergé o Edgar P. Jacobs, o de un Daniel Torres (con su influencia más que evidente de su Roco Vargas) dentro de nuestros autores ya consolidados de la línea clara de la Escuela Valenciana. Como buen lector de ciencia ficción, como él mismo reconoce, se nota que disfruta a la hora de enfrentarse a esta temática que le va como anillo al dedo y, como hemos apuntado ya, con un estilo de dibujo de la línea clara que se amolda perfectamente a este tipo de historia de aventuras espaciales… sobre todo a la hora de idear y crear cualquier tipo de artilugio, maquinaria o nave futurista, teniendo como referente, como el mismo reconoce, a uno de los más grandes dentro de este campo: el maestro Juan Giménez.
En cuanto a la edición de Planeta, continúan en la misma línea de ofrecernos algunos productos de la línea Forum en un formato de álbum europeo, de tapa dura, de 46 páginas en papel satinado de bajo gramaje. Formato que parece que va enfocado a las nuevas colecciones las cuales tienen previsto más de un volumen (como es el caso, por ejemplo, de El viaje de Darwin de José Fonollosa), que posiblemente dependiendo del resultado esperado y el seguimiento por parte del aficionado de la serialización de tal o cual título pueda desembocar en una futura edición integral con un mismo o menor tamaño.
Aún es pronto para saber (Planeta de momento no se ha pronunciado al respecto) cómo está funcionando esta nueva línea de jóvenes autores nacionales cuyo editor es Ricardo Esteban. Tiempo al tiempo. En este álbum en concreto solamente le reprocharía la baja calidad de impresión de algunas de sus páginas respecto a otras que propicia, por tanto, una irregularidad en la calidad final del producto. Mejorable a todas luces en beneficio del lector y, como no, del dibujante, para acercarse realmente a la idea final buscada por el autor como creador.
Y, para finalizar, recordaros que Javier Peinado es uno de los autores invitados del duodécimo Expocómic que lo tenemos ya al girar la esquina, por lo que tendréis oportunidad de que os pueda dedicar esta obra o la anterior al principio citada ya en este post.
Ah!, y recomendaros la magnífica entrevista que José A. Serrano realizó a ambos autores sobre esta obra en su imprescindible Guía del Cómic.
Un saludo cordial.
Aún es pronto para saber (Planeta de momento no se ha pronunciado al respecto) cómo está funcionando esta nueva línea de jóvenes autores nacionales cuyo editor es Ricardo Esteban. Tiempo al tiempo. En este álbum en concreto solamente le reprocharía la baja calidad de impresión de algunas de sus páginas respecto a otras que propicia, por tanto, una irregularidad en la calidad final del producto. Mejorable a todas luces en beneficio del lector y, como no, del dibujante, para acercarse realmente a la idea final buscada por el autor como creador.
Y, para finalizar, recordaros que Javier Peinado es uno de los autores invitados del duodécimo Expocómic que lo tenemos ya al girar la esquina, por lo que tendréis oportunidad de que os pueda dedicar esta obra o la anterior al principio citada ya en este post.
Ah!, y recomendaros la magnífica entrevista que José A. Serrano realizó a ambos autores sobre esta obra en su imprescindible Guía del Cómic.
Un saludo cordial.
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