CRÍTICA: LA GUARIDA DEL LEVIATÁN de Julio Videras & Isaac Casanova

No hay nada mejor por parte de una editorial que aprovechar el éxito obtenido con un título previamente publicado por la misma, para continuar con la formula y crear otro título de similares características, pero de distinta temática y, por supuesto, de diferente equipo creativo.

El título primero al que nos estamos refiriendo se trata, como ya habréis intuido, de El Joven Lovecraft de José Oliver y Bartolo Torres (podéis leer la reseña que Susana escribió en su momento pinchando aquí), del cual ya se han editado dos volúmenes (el primero de ellos yendo ya por su 4ª reedición, habiendo sido traducido también al català y al inglés) y en vistas de publicar un tercer tomo pero, posiblemente, dejando el formato tira para ya pasarse al formato cómic. La editorial es, por tanto, Diábolo Ediciones, donde se intuye claramente y por lógica que, tras el éxito de este primer título y aún funcionando muy bien para la editorial, hayan apostado por uno nuevo, La Guarida del Leviatán, de Julio Videras e Isaac Casanova.

Mientras que el primero trata en tono de humor las andanzas de un jovencito Howard P. (Howie) Lovecraft, este segundo, por supuesto también en tiras de humor, saca a relucir todas las peripecias y anécdotas que pueden surgir en una librería especializada de cómics entre los propietarios de la misma y toda la diversidad de aficionados y clientes que puedan acudir a ella en busca de sus lecturas y merchandising preferido.

La apuesta es clara… acercarse de manera directa y cercana al lector de cómics a través de tiras de humor donde uno se pueda sentir identificado en alguna que otra situación vivida por los protagonistas de esta historia, por haberla sufrido directamente en carnes, o haberla visto en algún que otro momento, naturalmente siempre con un tono de exageración que pueda producir la sonrisa, la risa e, incluso, la carcajada, pero sin eliminar del todo el viso de verosimilitud que puedan tener estas situaciones ficticias con las reales de una librería especializada en su día a día con toda la “fauna” que pulula por ella.

Nuestros protagonistas principales, Francisco y Paco, tanto monta, monta tanto… regentan la librería La Guarida del Leviatán, pintoresco nombre dado a la tienda a raiz de que un “auténtico” leviatán que vive en los sótanos del establecimiento. Aunque, todo hay que decir, sea una librería ficticia, está inspirada en la gaditana Leviatan Comics (recordemos que ambos autores viven en Cádiz) donde, como nota curiosa, sus dos propietarios se asemejan muchísimo a los protagonistas de esta obra… ¿casualidad?... ¿cuánta verdad debe haber en muchas de estas historias?... El resto de los protagonistas asiduos de estas tiras son todo tipo de clientes que puede tener una librería especializada arquetipo… encontramos desde aficionados que tienen como única afición los cómics, frikis de tomo y lomo, hasta el típico lector de toda la vida con un enorme potencial de compra gracias a su gran poder adquisitivo y que arrambla con todo, sin dejarnos a los clientes aspirantes a autores de cómic (y aquí es donde vemos también como secundarios de estas tiras a los propios autores), o las aficionadas que, haberlas, haylas, o el típico sabelotodo de todo, todo, todo lo concerniente a los tebeos… como podéis ver unos nutridos “especímenes” que representan muy bien este mundillo… ¿alguien se ve identificado en ellos?

Con un anfitrión y presentador de lujo, nada menos que el mismísmo Vincent Price, los gags que podemos encontrar pueden ir desde los problemas lógicos de mantener a flote una tienda especializada de este tipo hasta cómo se deben de enfrentar “correctamente” con la tan “distinguida” clientela, pasando por vivencias como ir a un salón del cómic, así como ser capaces de darnos lecciones de cómo es cada cliente, de qué pie cojea y qué tipo de lectura le caracteriza… toda una serie de situaciones de lo más divertidas, rocambolescas e hilarantes con las que pasar una divertidísima tarde de tebeos en el calor del hogar (a lo Price, vamos) ahora que parece que últimamente el tiempo no nos acompaña.

Una obra que sigue la tradición de la recopilación en formato álbum de buenas tiras de humor que han existido a los largo de la historia del Noveno Arte, y aunque sí que es verdad que la mayoría provenientes de la publicación de las mismas en la prensa escrita de manera diaria o dominical, en esta ocasión estas tiras (al igual que las de El Joven Lovecraft) provienen de su previa publicación en internet, de las numerosas ya hoy en día webcomics, un medio ideal aprovechando esta ventana total y global que es la red de redes para ofrecer a todo el mundo el trabajo de jóvenes autores que intentan abrirse camino en este difícil mundo del noveno arte en nuestro país, una manera rápida y económica de autoeditarse ellos mismos, un ejercicio a la vez de constancia y aprendizaje que posibilite en algún momento que alguna editorial se interese por este material y pueda ver la luz impreso como es aquí el caso.

En resumen, una buena oportunidad para el lector para echar unas risas con estas historias que nos cuentan las vicisitudes de Paco & Paco al frente de una tienda de cómics y, de paso, como ya hemos indicado más arriba, llegar a poder identificarte en alguna que otra situación que en ella pueda suceder… una manera distendida de pasar el rato y desconectar de los quebraderos de cabeza diarios de uno, aunque nos riamos a costa de los quebraderos de cabeza de nuestros protagonistas… qué le vamos a hacer, así es la vida… siempre es bueno de vez en cuando poder reírse de los demás y, sobre todo, reírse de uno mismo, ¿no creéis?

Un saludo cordial.